Indumentaria tradicional

Trajes, adornos y complementos

La indumentaria tradicional y popular de cada territorio obedece a una serie de determinantes naturales, como la protección contra las inclemencias del tiempo, a los que se añaden diversos y particulares elementos culturales, como el pudor, el sentido de la ornamentación o la diferenciación de circunstancias personales, que se ponen en relación con innumerables factores sociales y económicos.

En el valle de Bielsa, como en gran parte del Pirineo central, esta vestimenta desapareció como indumentaria habitual de sus gentes a principios del siglo XX.

Indumentaria de pastor

El pastor uniforma sus prendas en cualquiera de los valles pirenaicos, por la similitud de actividades y modos de vida en un ambiente hostil y el aprovechamiento de las pieles de los animales de su rebaño, etc., aunque con variaciones que dependen del clima y de la pluviosidad.

  • Llevaba, por lo general, calzón, abarcas con abarqueras, abrigo o pelliza de piel de oveja, con zurrón del mismo material.
  • Las piernas se protegían con "pieazos" de lana sujetos con ataduras de correas, rodeándolos y protegía la cabea el sombrero castoreño.
  • Otro elemento esencial es el palo o tocho, o la vara.

El traje del valle de Bielsa

En el valle de Bielsa, al igual que ocurre con otros hechos, el traje acusa alguna diferencia con respecto a los prototipos pirenaicos, producto del aislamiento y autarquía cultural de esta tierra. Así, sobre los elementos uniformes, se dan algunas singularidades.

Las mujeres

Vestían un corpiño de mangas largas, desprovisto de adornos, de color negro, cerrado con cordones flojos sin que se vea el pecho de la camisa porque queda cubierto por un pañuelo de seda, con flecos, y de grandes dimensiones. La falda era corta, hasta el empeine, de vuelo redondo, con delantal fino sobre ella. Portaban un pañuelo doblado a la cabeza, que en el caso de las mujeres solteras lo llevaban anudado a un lado y las casadas detrás. De calzado portaban zapatos. Como adorno, solían llevar pendientes de dos cuerpos y gargantilla.

Los hombres

Vestían blusa de tela oscura sobre la camisa blanca, anudada sobre el vientre, y sobre ambas un chaleco de paño negro con botones. La faja es amplia y cubre hasta el arranque de la pierna. Calzón abierto, con amplios calzoncillos asomando las marinetas. Medias de estambre y peales negros de lana, con alpargatas de cintas miñoneras.